
Vamos a ponernos al lío con otro Do It Yourself. Esta vez hablaremos de cómo almacenar los zapatos de una temporada para otra sin morir en el intento.
Desde niña he visto a mi madre guardar sus zapatos de otras temporadas en sus respectivas cajas. Gracias a esa característica mirada de asombro y admiración que sienten los niños ante cualquier cosa, podía encontrar cierta magia en el olor a cuero cerrado, en el ruido de las cajas de cartón cuando se cerraban con sus respectivas tapaderas, en conservar los zapatos en su envoltorio original para que no sufriesen con el polvo ni se deformasen…
Pero había algo que me causaba cierta extrañeza:
– Mamá, ¿Cómo sabes qué par de zapatos hay en cada caja?
Mi madre me explicaba que ella conocía cada caja y los zapatos que había dentro. ¡Claro! A esas edades los padres lo saben todo, pero ¿cómo podía una mortal como yo saber lo que escondía cada uno de esos cofres del tesoro?
Muchas años más tarde, esta cuestión que aguardaba en mi cerebro germinó dando a luz una idea que, a pesar de no ser revolucionaria; solventaba este problema de una manera sencilla y eficaz.
Cómo identificar el contenido del interior de las cajas de zapatos
Material:
– Cajas de zapatos
– Folios con fotografías impresas
– Forro adhesivo de libros
– Tijeras (y regla y lápiz por si queremos afinar bien las medidas)

- En primer lugar, no hace falta decir que para que nuestro armario (o zapatero) no parezca atacado por el Síndrome de Diógenes, retiraremos todas las cajas rotas, deformadas, descoloridas o viejas y las sustituiremos por cajas que se encuentren en mejor estado.
- El segundo paso a realizar, será fotografiar todos nuestros pares de zapatos con una fotografía en la que se pueda distinguir bien de qué par se trata.

A continuación, deberemos imprimir estas fotos con un tamaño aproximado de 6×8 cm.
*Truco: yo las imprimo desde el «Visualizador de fotos de Windows», que te da la opción de imprimir a varios tamaños. El tamaño «bolsillo» que nos ofrece es perfecto y además caben 9 fotos en un folio (porque también hay que pensar en el medio ambiente, jeje).
- Luego deberemos recortarlas y también recortar el forro de libros con una medida de unos 16×12 cm (más o menos para que al pegar la foto sobresalgan al menos un par de centímetros por cada lado).

- A continuación, despegaremos el papel protector del forro y pegaremos sobre él con mucho cuidado la fotografía recortada. La parte impresa de la fotografía deberá quedar en contacto con la cara adhesiva del forro.

- Por último, pegaremos el forro adhesivo con la fotografía sobre la cara de la caja que vaya a estar visible en nuestro armario. Tendremos que pegarla teniendo en cuenta hasta dónde llega la tapadera para evitar pegarla donde luego vaya a quedar oculta por ella.


¡Y listo! ¿Qué os parece? ¿Os sirve como método para guardar vuestros zapatos durante la temporada en que no los estéis usando?

Yo lo que hago es guardar los zapatos que tengo en uso en el zapatero y guardar en el altillo del armario en sus respectivas cajas los que no están en uso. Aunque confieso que ni aún así consigo tener siempre el suelo del dormitorio despejado de zapatos. Soy un desastre, lo sé.
Si alguno de estos trucos o prácticas os han servido como inspiración para mantener la casa en orden vuestro día a día y saber dónde están todos vuestros zapatos, me daré plenamente por satisfecha. Así que si los ponéis en práctica, no olvidéis comentármelo aquí abajo y enseñarme vuestras fotos por las redes sociales.
¡Un fuerte abrazo para tod@s!
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