Tengo un cajón donde voy guardando todos los collares, anillos, pendientes y pulseras. Pero con la limpieza de armario que realicé este verano pensé «hay que poner orden a esto, no hay quien encuentre nada aquí».
Así que empecé a pensar cómo apañármelas para lograr un poco más de organización. La primera conclusión a la que llegué fue que había que clasificar las joyas por tipología: las pulseras en un sitio, los collares en otro, y así con todo.
Bien, llegados a este punto, ¿dónde guardamos las pulseras? Me pregunté en qué recipiente las podía meter para que aquellas que son menos flexibles también cupiesen… et voilà! De repente aquí tenía la solución.
Para hacer esta caja clasificadora tan solo necesitáis:
- Una caja de madera de las que se utilizan para regalar o conservar botellas de vino
- Pegamento fuerte apto para madera (por ejemplo este de Pattex que se ve unas imágenes más abajo)
- Un cúter
- Una lija
- Un lápiz
- Una regla o flexómetro
- Pintura para madera (opcional)
PONGÁMONOS MANOS A LA OBRA:
Lo primero de todo es hacerse con una caja de vino de las de madera. Seguro que tenéis alguna por casa de una cesta de Navidad o algún cumpleaños; y si no, las podéis encontrar en cualquier bodega por unos pocos euros.
A continuación, quitamos la cuerda de la caja con la ayuda de unas tijeras (a no ser que queramos hacer que el joyero sea colgante, que también es una opción interesante si no disponemos de mucho espacio).
Con un lápiz tomaremos la medida de la anchura de la caja y la marcaremos en la pieza de madera correspondiente a la tapa. Haremos tantas marcas como nos lo permita la longitud de la tapa.
Una vez hechas las marcas, pasaremos varias veces un cúter sobre ellas (este tipo de madera es tan delgada que permite cortarla con un simple cúter). Para que el trabajo quede más fino, lijaremos un poco los bordes para evitar que queden astillas.
Este paso es opcional, pero si lo deseamos podemos pintar la caja de colores o añadirle algún tipo de decoración. Yo tenía un par de botes de pintura abiertos por casa, así que la pinté de color verde y amarillo. ¿Y a vosotros? ¿Os gusta pintada o la preferís con un toque más rústico en color madera?
El último paso consiste en encajar en la caja de vino las piezas de madera que hemos cortado a medida. Para fijarlas será suficiente con una gotita de pegamento en cada esquina que luego podremos extender con un bastoncito de algodón (para disimular el pegamento también podemos pintar encima una vez seco).
Este sería el resultado básico: una caja sólida con separadores para guardar nuestras pulseras o lo que nos apetezca.
Como veis, yo disimulé el pegamento del interior pintando sobre él. Y con el trocito de madera que me sobró de la tapadera hice este letrero decorativo con un rotulador permanente (puede llevar escrito el mensaje «pulseras» o el que vosotros queráis: «mis joyas», «mis pequeños ahorros», «trastitos», «mis grandes tesoros»…).
Aquí os dejo el aspecto del joyero con todas mis pulseras ya guardadas. ¿Qué os parece? Espero que lo hayáis encontrado útil y os haya servido de inspiración para guardar vuestras joyas o cualquier otra cosa.
¡Un fuerte abrazo! Nos vemos en el próximo post.
2 Comments
¿Puedes aportar mas informacion?, ha sido Genial encontrar mas explicaciones sobre este tema.
Saludos
Hola Dreamlux:
Muchas gracias por tu comentario. Se trata de una caja de vino. Son de madera y suelen ser baratitas (incluso a veces las regalan en alguna promoción). Luego con un poco de pegamento y de pintura se maquilla todo dándole este aspecto.
Si tienes alguna pregunta en concreto no dudes en formulármela. Estaré encantada de responderte.
Mil gracias por leerme. Un fuerte abrazo.