
Llega el otoño. Y para algunas recetas esta es la época ideal. Por ejemplo: con las primeras lluvias y bajadas de temperatura llegan las esperadas setas. Una ocasión perfecta para cocinar un buen risotto de setas y jamón.
Ingredientes:
- Arroz (yo todavía no he dado con el adecuado. Os dejo nota abajo)
- Jamón
- Setas variadas: champiñones, Portobello, funghi Porcini, Boletus edulis…
- Un litro de caldo (de pollo, de verduras, de lo que tengáis en casa)
- Una tacita de salsa de pimienta o nata (opcional)

*Os decía que aún no he dado con el tipo de arroz adecuado. He probado arroz bomba y está genial para tomarlo en el momento. Sin embargo, queda muy pegajoso (como gachas) si en vez de comerlo al instante lo conservamos para llevar al trabajo. También he probado con arroz vaporizado, pero pasa justo lo contrario: queda muy seco y eso hace que apenas tome el sabor del caldo con el que lo cocinamos, por lo que si lo usamos para llevar al día siguiente, quedará muy soso. Si lo vais a consumir al momento de cocinarlo, el bomba está bien, pero si lo vais a usar para llevar al trabajo… si descubrís cuál es la variedad de arroz adecuada, informadme, porfi :)
**Yo en esta receta suelo usar una tacita pequeña de salsa de pimienta, pero no es obligatorio añadírsela. Os cuento un secreto: esa salsa de pimienta es la que me sobra cuando vamos a algún mesón de esos que sirven solomillo a la pimienta. Si alguien pide ese plato, yo pido la salsa que sobra para llevar. Os aseguro que le da al risotto un toque meloso y apimentado muy bueno. Pero como os decía no es imprescindible añadirle esta salsa ni añadirle nata.
Modo de preparación del Risotto:
En primer lugar, cortaremos a trocitos las setas y el jamón.

Precalentamos la sartén y rehogamos las setas. A continuación, añadimos el jamón y removemos hasta que todo esté en su punto. Es en este momento cuando añadiremos el arroz y lo saltearemos todo junto durante unos minutos.

Tras removerlo todo junto es cuando yo añado la tacita de salsa a la pimienta. No obstante, este paso lo podéis obviar si queréis un plato más ligero.
Lo importante del risotto es no dejar de remover nunca. Poco a poco iremos añadiendo cacitos de caldo e iremos removiendo el arroz.

Dependiendo del tipo de arroz que hayamos usado este proceso tardará de 20 a 40 minutos. Es el paso más pesado y aburrido del risotto, pero es importante no dejar de remover para que o se nos pegue el arroz al fondo de la sartén.
Probaremos el arroz cuando haya transcurrido el tiempo recomendado en el paquete y evaluaremos si necesitamos algunos minutos más de cocinado o si ya podemos retirarlo del fuego.

¡Y listo! Así es como se prepara un risotto casero. Esta es solo una receta con algunos ingredientes de temporada, pero si os ha gustado el resultado podéis probar a cocinar el risotto con otros ingredientes. Si lo hacéis, no olvidéis contarme vuestras recetas y resultados.
Un abrazo muy grande y hasta el próximo post.
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