Notición, amig@s: ¡Este martes fue mi cumple! Jajajajaja. Y como el lunes era festivo, lo celebré en casita con la familia, como toca. ¡Cómo me gusta a mí organizar una comida en casa!
El menú no consistió en platos contundentes y pesados ni mucho menos, sino más bien en una picadita de cosas ligeras y muy veraniegas. Aquí abajo os dejo la minuta:
Entrantes
- Para ir abriendo boca con el picoteo ¿qué hay más español que unas olivitas? Truco: para darles un toque casero y personal a las olivas no hay nada como aliñarlas con un poco de aceite, romero y orégano. ¡No quedará ni la de la vergüenza!
- Comenzamos con una ensaladita muy refrescante de tomate y pepino. El truco de esta receta es macerar unas hojitas de albahaca en el aceite con que la vayamos a aliñar. Además, yo no desecho el jugo de los tomates, por lo que al final se crea un riquísimo caldito de agua de tomate con aceite y albahaca que impregna de sabor la ensalada.
- Continuamos con otra ensalada. Los ingredientes de esta son: lechuga romana, piñones tostados, queso de cabra, maíz, tiras de bacon a la plancha y una vinagreta. El truco de esta ensalada consiste en que para cocinar el queso de cabra y que no se nos desparrame fundido por la sartén, debemos espolvorear un poco de azúcar por encima de las rodajas de queso, así se caramelizará y quedará perfecto.
- El siguiente plato no es tan ligero pero está buenísimo: Camembert frito con mermelada de tomate. El truco de este plato es utilizar mermelada de tomate ¡le va ideal! Y por otra parte, para rebozar los quesitos camembert yo he utilizado simplemente huevo y luego un poco de pan rallado. Así de fácil.
- Y para terminar con los entrantes: un chupito de salsa guacamole con gambas en gabardina caseritas. Para el guacamole, en vez de cebolla yo añado cebollino, así la salsa está mucho más suave y más digestiva. Y para el rebozado de las gambas utilizo harina, huevo y tanto levadura como cerveza. ¡Quedan esponjosísimas!
Como transición entre los primeros y los segundos, mi chico hizo unos pescaditos de playa fritos y una clóchinas al vapor riquíiiiiisimas. ¿Truco? Ninguno, la mano que tiene él, jejeje.
Plato principal
- Y por fin llega el segundo: Dorada a la espalda con patatas al horno. Tal vez la pinta no sea de los más exquisita, pero os aseguro que es un plato delicioso. ¿Truco? Bañar muy bien en aceite la dorada a la espalda en su fuente y añadirle por encima unas escamitas de sal y unas láminas de ajo. ¿El truco para las patatas? Cortarlas finitas, bañarlas bien en aceite para que no se peguen, orégano, romero, pimienta, sal y muuuuuuuucha paciencia: cuanto más tiempo estén en el horno a temperatura bajita, más tiernas quedarán.
Postre
- De postre, ¡aprovechemos que estamos en verano! Fruta de temporada es la opción más veraniega. Truco: parte y pela la fruta y preséntala toda en una fuente ¡verás como se acaba! En este caso la fuerte llevaba piña, melón y sandía.
- ¿Y qué sería de un cumpleaños sin la tarta? Esta es la tarta de chocolate con galletas, hecha por mi madre según la receta de mi abuela. Si queréis saber el truco de esta, no tenéis más que pedírmelo y próximamente os contaré paso a paso cómo se hace ¿trato hecho?
¿Qué? ¿Os animáis con alguno de estos platos de verano para poner en práctica sus trucos? Si hacéis alguno ya me lo contaréis. Estoy ansiosa por leeros.
Un beso a tod@s y hasta el próximo post.
