Hace un año por estas fechas escribí un post sobre lo fácil, económico y agradecido que resulta decorar nuestro hogar con frutas. Así que este año he decidido contaros que también es posible hacer esto mismo con verduras.

Tal vez las verduras estén algo denostadas en decoración porque solemos verlas como algo demasiado humilde y poco glamuroso como para servir de ornamento. Sin embargo, ha sido (y sigue siendo) una temática de los más recurrente en cualquier bodegón. Así que, ¿por qué no explotar este material que tenemos a nuestro alcance constantemente en nuestros hogares?

Hoy os voy a enseñar algunos ejemplos de lo fácil y resultón que es decorar con verduras.

Decorar con verduras

Alcachofas

El fin de semana pasado fui al mercado (excursión que me encanta realizar los sábados para comprar el mejor género mientras sientes la cercanía de los negocios locales), y me pasó algo muy gracioso. Resulta que en uno de los puestos en los que suelo comprar verdura, había colgada una alcachofa ya madura (con la flor bien abierta). Cuando me estaban atendiendo se me ocurrió decir:

– Qué bonita la alcachofa que tenéis ahí toda abierta.

– No te pongas celosa -me dijo el tendero-, esta alcachofa te la doy para ti para que te la quedes.

Me reí de la situación y le di las gracias al dependiente. El resto de las compras las hice con la flor de la alcachofa en la mano, despertando la curiosidad (y también los comentarios) en la gente con la que me iba cruzando.

Y ahora, unos días más tarde, la alcachofa se sigue abriendo y cambiando los colores para convertirse en esta preciosa flor decorativa. ¿Os habíais imaginado alguna vez que una alcachofa puede quedar tan bonita en un florero?

flor alcachofa
La flor de la alcachofa queda tan decorativa como cualquier otra

Pero tampoco es necesario irse a la flor de la alcachofa para crear una decoración bonita. Las alcachofas tal y como las compramos habitualmente son la mar de decorativas. Prueba a ponerlas en un frutero y verás qué bien quedan.

alcachofa
Alcachofas en un frutero

Verduras de hoja verde: Lechuga, escarola, coles, acelgas…

No obstante, hasta una lechuga, una col o una escarola pueden resultar decorativas. Prueba a ponerlas en una cesta bonita y verás qué aspecto más sano y verde aportan a tu cocina.

escarola verduras deco
La escarola en una cesta de mimbre queda igual de bonita que la maceta más frondosa.. Mientras, Sauron cotillea la compra por el fondo ¡cómo no!

Incluso, ¿habéis pensado alguna vez que la ensalada es muy bonita antes de prepararla? Obviamente no la vamos a dejar todo el día sobre la mesa o la bancada una vez está lista para comer (se oxidaría). Pero… ¿a que a much@s de vosotr@s os gusta «atemperar» las verduras y tomates antes de comerlas? Por ejemplo, yo odio comer tomates fríos; me da la sensación de que pierden todo el sabor. Y ¡mirad qué bonito queda el plato con la lechuga hoja de roble, el tomate y la col lombarda unas horas antes de ponerme manos a la obra con ellas!

ensalada deco
¡Hasta el plato de la ensalada antes de prepararla resulta decorativo! Sauron continúa con su expedición del banco de la cocina y los pajaritos al otro lado de la ventana.

Bodegones de hortalizas

¿Y qué me decís de las zanahorias? Con sus hojas o sin ellas dan un toque de color a cualquier lugar. ¿Y el apio o el perejil que inundan de frescor y color esmeralda todo lo que tocan? Es el caso de esta cesta que coloqué en el comedor un día al lleguar del mercado. Como no iba a cocinar hasta el día siguiente, en vez de meter los productos en la nevera los dejé de decoración, ¿no queda precioso?

zanahorias y apio como deco
Una cesta con apio, perejil y zanahorias frescas. Si no vas a cocinarlas enseguida, haz que sirvan para engalanar la cocina, el comedor o el salón.

No podían faltar las hortalizas. Son el bodegón perfecto: berenjenas, calabacines, zanahorias… Quedarán perfectos en una fuente grande junto con tomates, lechuga, coles… Además mantener unos días las frutas, verduras y hortalizas en una fuente es perfecto para que se terminen de madurar y pierdan su acidez.

¿No os da rabia comer tomates verdes? ¿o morder plátanos fríos a los que les faltan un par de días para madurar? Pues yo tengo comprobado que en una fuente fuera de la nevera es donde mejor se conservan y maduran. ¡Ah! ¿Y sabíais que los plátanos se me ponen más negros en la nevera que fuera de ella? ¿O que no consigo que los tomates me maduren en el frigorífico y por tanto «no me saben tanto a tomate» como deberían?

bodegón de verduras
El clásico bodegón de verduras: verdes, rojos, morados, naranjas… Una forma de dar color y vida a tu hogar sin gastar un euro de más.

¿Te animas a usar las verduras como elemento decorativo?

La conclusión que extraigo de todo esto es que muchas veces las verduras se conservan mejor fuera de la nevera durante un par de días, así que ¿por qué no aprovechar esto para sacarlas de lugares ocultos y hacer que decoren un poco nuestros hogares?

Ya veréis cómo alegran vuestra vista y además os hacen ser más conscientes de la cantidad de verduras que coméis a lo largo de la semana (que siempre da satisfacción, ¿verdad?).

¡Incluso esto también podría convertirse en aliciente para comer más sano!: «Acción: se me han acabado los tomates y calabacines que decoran mi cocina. Reacción: pues habrá que comprar más».

PD: Espero ver vuestros bodegones de verduras por las redes sociales y que me dejéis aquí abajo vuestros comentarios.

Un fuerte abrazo a tod@s y feliz semana ;)

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